El poder económico mundial que no traduce más que el poder del capital sobre el hombre de nuevo queda en evidencia sobre su verdadera conducta y sus propósitos.
La llamada banca internacional determina cualquier tipo de aventura o riesgo económico, sin control alguno o muy poco de parte de su socio: el estado. Deciden entre otras inflar las economías en base al negocio inmobiliario en el cual asfixian a los atrevidos ciudadanos que opten por adquirir un sueño llamado casa o piso y a la vez se traspasan entre ellos las susodichas hipotecas inflándolas, como en un juego de niños y globos, hasta llevarlas al limite del estallamiento, mientras el hipotecante hace ingentes esfuerzos para pagar y terminar abdicando de su sueño ante la trepada sin control de su crédito .
Y cuando son tantos los ciudadanos arruinados que se les imposibilita pagar, la burbuja estalla y el niño bancario se asusta, grita y patalea para que su papá estado le saque de la íliquidez por falta de pagos y del arrume de ladrillos que ahora no le representan nada.
Los estados corren a auxiliar ahora al sistemita de marras y se les ocurre echar mano del dinero del fisco , es decir del mismo dinero sacado de los mismos ciudadanos que fueron arruinados por el sistema financiero hipotecario y así alivian, al avariento que no le salió bien el truco y vuelve a castigar al iluso que soñaba con un microcastillo de piedras y ahora lo consuela dicíendole o prometiendole que sus ahorritos no se verán comprometidos aunque la banca esté quebrada y el mismo estado lo sea.
En ultimas los ciudadanos son víctimas del sistema al cual ellos eligieron para que les dominara sus vidas y sus dineros y no hay forma de cambiar semejante perversión mientras sigamos permitiendo que los estados definan todos los tejemanejes del genero humano a través de la clase politica aliada al poder de los capitales quienes en ultimas siguen tomando todas las decisiones de una democracia limitada a una papeleta llamada voto y a un dejar hacer dejar pasar de la vida moderna.
No solo el poder financiero y político acaba con la ilusión de una casa en la tierra sino también con la ilusión de una casa en el aire que ahora se asfixia por efecto de la desestabilización del planeta tambièn causada por los poderosos.
Miremos con optimismo tanta crisis junta para todos a ver si por fin entendemos que hay que cambiar el rumbo. Amanecerá y veremos dijo Pabla………….
Teruel 2008
jueves, 9 de octubre de 2008
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