domingo, 19 de abril de 2009

LA CRISIS Y AMERICA LATINA: UNA ESPERANZA PERDIDA

Cuando estábamos en America Latina solíamos discutir con nuestros amigos sobre las perspectivas de futuro para la humanidad y más concretamente para los llamados países del tercer mundo.

Decían algunos, entonces, que las llamadas apertura económica y globalización podrían ser benéficas. Pero dichas políticas fueron aplicadas al extremo en la mayoría de nuestros países hasta convertir a sus estados solo en administradores de la carga impositiva y se hizo desaparecer sus empresas publicas - casi todas- con el argumento que lo publico no producía por el desgano con que los trabajadores se comportaban en éstas empresas y las supuestas grandes cargas económicas que ellos mismos demandaban a través de prebendas laborales. Además esquilmaron nuestros campos agrícolas ante el advenimiento de productos de países desarrollados a unos costes muy inferiores a los nuestros; quedando entonces una gran masa de campesinos en la miseria quienes tuvieron que derivar su fuerza de trabajo hacia los cultivos ilícitos o engrosar las largas caravanas de campesinos pobres hacia los tugurios de las capitales latinoamericanas.
En conclusión la apertura económica amplió más las desigualdades entre capitalistas y trabajadores.

Muchos Latinoamericanos tuvieron que inmigrar ante el desmejoramiento de la situación laboral y ante el acoso de la mayor violencia delincuencial que se produjo como consecuencia y hoy están en la UE y USA engrosado la fila de los trabajadores de oficios básicos de esos países y enviando remesas en Euros y Dolares a sus propios paises.

Se pensaba que Europa podría haber sido una posible salida al avasallamiento que USA imponía a nuestros países a través de sus sus entes económicos, ya que percibíamos como provechoso o bondadoso la liberación de fronteras , su moneda única , la integración de países que ocurrían en éste lado del mundo y el respeto por el derecho de las personas. Además desde el punto de vista humano creíamos que Europa sería la salida del hombre hacia un mundo más justo y equitativo.

Pero pasó el tiempo y la Crisis actual se nos vino encima como un alud anunciado de antemano y quedó en evidencia que los mercados y sus representantes en política europea hablan el mismo lenguaje que USA y comparten la misma mesa, y que los grandes y esperanzadores billones de Euros aprobados en el reciente G20 , intentaran sanear a esa Economía capitalista; quedando muy escasos euros para los países del tercer mundo a los cuales les tocará seguir construyendo una mayor integración a fin de resolver sus diferencias internas y avanzar en un mundo postcrisis con sus propios pasos y alejándose en lo que más se pueda del sometimiento económico al que he estado atado por centurias. Y no solo el desarrollo económico sino el humano será la gran tarea que America Latina y en general el tercer mundo deberá resolver en éste siglo y la cuarta Cumbre de las Américas reunida en Trinidad y Tobago en está fecha, ojala sea el inicio en firme de tan ardua acometida.

Ni Europa, ni USA ni la globalización han podido resolver los problemas del subdesarrollo de America Latina o Africa del cual fueron sus originarios gestores. No parece existir una intención de ayuda sincera, y con la actual crisis aun menos.

alfredoivan50@gmail.com

Teruel. España. 2009